martes, 8 de julio de 2014

Los viajes de Beirut




Cuando se habla de música se dicen muchas cosas, como las sensaciones, emociones, recuerdos y los viajes que nos evoca. Es así como Beirut con un toque especial es capaz de  transportarnos a varias partes del mundo con su música: a los Balcanes, a los pueblos de Oaxaca, a París y otros lugares. Beirut es una banda originaria de Nuevo México que inicia como un proyecto musical personal de Zach Condon el cual creció, convirtiéndose en una banda con una diversidad de instrumentos como la trompeta, los trombones, el acordeón, el ukulele, el violín, los tambores, etc., y todos ellos mezclados de una manera armoniosa nos trasladan a diferentes lugares por medio de ondas sonoras multiculturales.

Ahora, sólo hablaremos de tres albums, aunque cuentan con más creaciones, pero mencionaré las cuales a mi juicio nos ayudarán a entender mejor el trabajo tan genuino de Beirut.

Es interesante como Zach Condon trabajando en una sala de cine y gracias a una proyección de cine balcánico tuvo la oportunidad de escuchar la música de esta región la cual lo llevó en la búsqueda de esos sonidos. El viaje a Europa Oriental traería consigo a su regreso las ideas y las nuevas experimentaciones para su primer álbum Gulag Orkestar, con temas como “Brandenburg”, “Moutain Wroclai”, “Scenic World” y el más escuchado, “Postcards from Italy”. Escuchar este álbum es como sentirse en alguna caravana gitana, o en otros momentos te da la sensación de estar en un café italiano. Este primer trabajo no es la más grande obra de arte de Beirut pero marcó la pauta para las próximas creaciones musicales.

Siguiendo el viaje musical, llegamos con el album “The Flying Club Cup” de 2007, inspirado en Francia, donde Beirut prueba un poco de la chanson francesa. La mayoría de las canciones hablan de ciudades y lugares franceses como “Nantes”, “La Banlieue” o “Cherbourg”. Las canciones más conocidas de este álbum es “A Sunday Smile”, “Guyamas Sonoras” y “The Penalty”. En este nuevo material se siente la nostalgia y la felicidad a la vez, realmente es irresistible, singular, lleva la marca inconfundible de Beirut y su viaje por Europa buscando nuevos sonidos, construyendo una historia. 

Después “The Flying Club Cup”, Beirut nos tenía en la incertidumbre sobre el siguiente lugar al que nos llevarían con su música. ¿Dónde más?, y nos tomaron por sorpresa porque llegamos a los Valles oaxaqueños, en un pueblito zapoteco. Este nuevo viaje dio lugar a su siguiente álbum en el año 2009 llamado “March of the Zapotec and real people holland”  donde colaboraron con una banda de pueblo llamada “Jiménez”. Los nombres de las canciones son representativos del lugar como “El Zócalo” y “La Llorona”. Beirut y la melancolía acostumbrada de su singular música encontraron lugar en la música de pueblo oaxaqueña.

Podríamos seguir hablando de los diversos materiales que ha producido Beirut porque nos hemos saltado “Lon Gisland”, “Elephant Gun” y “The Rip Tide” que son parte esencial de su búsqueda y experimentación de nuevas vías sonoras. Sin embargo, para mejor conocimiento de su música habría que escuchar por ustedes mismos y ver qué forma toma la propuesta musical de Beirut en su sentido auditivo.

Algunos podrán llamar la música de Beirut, exótica pero en realidad su proyecto es reflejo de la búsqueda experimental de nuevas ondas sonoras, reflejo de espíritus inquietos inconformes con lo común y lo cotidiano. Músicos marcados por las travesías. La propuesta de Beirut no puede estar encasillada a un género musical o un estilo, nadie ha podido descifrar que es lo que ellos hacen pero no tendría que ser descifrado. Algunos han dicho que Beirut es indie, otros dicen worldmusic, pero no es ninguno de los dos, es diferente.


La melancolía de la banda, su no alienación musical a lo común, su universo de instrumentos, la mezcla de sonidos tradicionales con sonidos modernos, a veces con un tinte electrónico hacen de Beirut una propuesta musical diversa de la cual se puede esperar mucho, sólo es cuestión de escuchar, sintonizar la infinidad de posibilidades sonoras y dejarse llevar. 

Por Dunia Conde

Álbum: Gulag Orkestar
Año: 2006




Álbum: The Flying Club Cup
Año: 2007






Canción: La Llorona
Álbum: March of Zapotec
Año: 2009




1 comentario:

  1. Excelente trabajo. No solo es una cronología sino una visión de la música Beirut. Cierto, sus trabajos tienen melancolía y algo quizás inédito, en lo personales, son capaces de "escuchar" la música de distintos rincones del mundo, de sus instrumentos y hacer una re creación.

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