Cuando
se habla de música se dicen muchas cosas, como las sensaciones, emociones, recuerdos
y los viajes que nos evoca. Es así como Beirut con un toque especial es capaz
de transportarnos a varias partes del
mundo con su música: a los Balcanes, a los pueblos de Oaxaca, a París y otros
lugares. Beirut es una banda originaria de Nuevo México que inicia
como un proyecto musical personal de Zach Condon el cual creció, convirtiéndose en una banda con una diversidad de instrumentos como la trompeta, los trombones, el
acordeón, el ukulele, el violín, los tambores, etc., y todos ellos mezclados de
una manera armoniosa nos trasladan a diferentes lugares por medio de ondas
sonoras multiculturales.
Ahora, sólo hablaremos de tres albums, aunque cuentan con más creaciones, pero mencionaré las cuales a mi juicio nos ayudarán a entender mejor el trabajo tan genuino de Beirut.
Es
interesante como Zach Condon trabajando en una sala de cine y gracias a una proyección
de cine balcánico tuvo la oportunidad de escuchar la música de esta región la
cual lo llevó en la búsqueda de esos sonidos. El viaje a Europa Oriental traería
consigo a su regreso las ideas y las nuevas experimentaciones para su primer álbum
Gulag Orkestar, con temas como “Brandenburg”,
“Moutain Wroclai”, “Scenic World” y el más escuchado, “Postcards from Italy”. Escuchar
este álbum es como sentirse en alguna caravana gitana, o en otros momentos te
da la sensación de estar en un café italiano. Este primer trabajo no es la más
grande obra de arte de Beirut pero marcó la pauta para las próximas creaciones
musicales.
Siguiendo
el viaje musical, llegamos con el album “The Flying Club Cup” de 2007,
inspirado en Francia, donde Beirut prueba un poco de la chanson francesa. La mayoría de las canciones hablan de ciudades
y lugares franceses como “Nantes”, “La Banlieue” o “Cherbourg”. Las canciones
más conocidas de este álbum es “A Sunday Smile”, “Guyamas Sonoras” y “The
Penalty”. En este nuevo material se siente la nostalgia y la felicidad a la
vez, realmente es irresistible, singular, lleva la marca inconfundible de Beirut
y su viaje por Europa buscando nuevos sonidos, construyendo una historia.
Después
“The Flying Club Cup”, Beirut nos tenía en la incertidumbre sobre el siguiente
lugar al que nos llevarían con su música. ¿Dónde más?, y nos tomaron por sorpresa
porque llegamos a los Valles oaxaqueños, en un pueblito zapoteco. Este nuevo
viaje dio lugar a su siguiente álbum en el año 2009 llamado “March of the
Zapotec and real people holland” donde
colaboraron con una banda de pueblo llamada “Jiménez”. Los nombres de las
canciones son representativos del lugar como “El Zócalo” y “La Llorona”. Beirut
y la melancolía acostumbrada de su singular música encontraron lugar en la
música de pueblo oaxaqueña.
Podríamos
seguir hablando de los diversos materiales que ha producido Beirut porque nos
hemos saltado “Lon Gisland”, “Elephant Gun” y “The Rip Tide” que son parte
esencial de su búsqueda y experimentación de nuevas vías sonoras. Sin embargo,
para mejor conocimiento de su música habría que escuchar por ustedes mismos y
ver qué forma toma la propuesta musical de Beirut en su sentido auditivo.
Algunos
podrán llamar la música de Beirut, exótica pero en realidad su proyecto es
reflejo de la búsqueda experimental de nuevas ondas sonoras, reflejo de espíritus
inquietos inconformes con lo común y lo cotidiano. Músicos marcados por las
travesías. La propuesta de Beirut no puede estar encasillada a un género
musical o un estilo, nadie ha podido descifrar que es lo que ellos hacen pero
no tendría que ser descifrado. Algunos han dicho que Beirut es indie, otros dicen worldmusic, pero no es ninguno de los dos, es diferente.
La
melancolía de la banda, su no alienación musical a lo común, su universo de
instrumentos, la mezcla de sonidos tradicionales con sonidos modernos, a veces
con un tinte electrónico hacen de Beirut una propuesta musical diversa de la
cual se puede esperar mucho, sólo es cuestión de escuchar, sintonizar la infinidad
de posibilidades sonoras y dejarse llevar.
Por Dunia Conde
Álbum: Gulag Orkestar
Año: 2006
Álbum: The Flying Club Cup
Año: 2007
Canción: La Llorona
Álbum: March of Zapotec
Año: 2009
Excelente trabajo. No solo es una cronología sino una visión de la música Beirut. Cierto, sus trabajos tienen melancolía y algo quizás inédito, en lo personales, son capaces de "escuchar" la música de distintos rincones del mundo, de sus instrumentos y hacer una re creación.
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